Es la línea más habitual y la que mejor funciona en la mayoría de los casos. El efecto trata de imitar al patrón de nacimiento real del cabello y se consigue colocando puntos dispersos a lo largo de la línea diseñada, de forma aleatoria y, obviamente, por debajo de la misma. A veces Aldemar Campos aconseja “romper” la línea de forma más agresiva para restar aspecto lineal y a la vez mantener una impresión de densidad en el tratamiento.

Son cada vez más solicitadas. La razón es que son las que hacen que el tratamiento sea todavía más imperceptible. Son ideales para pieles claras y personas que no buscan demasiada densidad sino más bien enmarcar ligeramente su rostro y conseguir la apariencia de un grado de alopecia ligero y no muy avanzado. Cuando se trata de este tipo de línea, el especialista va afinando el punto de forma gradual a la vez que diluye cada vez más el pigmento, para conseguir un tono más claro a medida que se acerca a la línea frontal proyectada con el tratamiento de Micropigmentación Capilar. Aconsejamos la línea desvanecida a todos aquellos que desean un tratamiento sutil que el cambio en su aspecto no sea demasiado evidente.

Este estilo de línea no es adecuado más que para ciertas personas, pero hay ocasiones en las que el estilo se adapta de forma excelente al perfil del individuo y el tratamiento de Micropigmentación Capilar se ve totalmente natural además de aportar una imagen actual y juvenil. Pueden optar a este estilo de línea frontal los que no presentan un grado avanzado de alopecia que permita al especialista realizar un blending (“mezclar” pigmento y cabello) impecable. En ocasiones, para aportar más naturalidad, se puede romper la línea en ciertos puntos o utilizar un tono de pigmento más claro en las zonas más definidas de la línea.