Actualmente, hay tantos tratamientos y con ellos muchas dudas sobre la efectividad contra este problema. Esto nos lleva a preguntar e indagar sobre cada uno. Eso es algo bueno, porque mientras más información tengamos más herramientas tendremos para decidir el mejor tratamiento para nuestro caso. A continuación enuncio brevemente los tratamientos más utilizados para detener la caída e incrementar el nacimiento de pelo. Son varios, pero no todos resuelven el gran dilema y muchas podrían ser soluciones preventivas o para actuar en las primeras fases de la alopecia.
Se dice que en el hombre está más o menos aceptada la alopecia, y que para las mujeres es un tema que acompleja y preocupa. No sé yo, pero creo que a todos nos afecta porque no es algo que no pedimos ni deseamos. Si alguien nos vendiera algo o nos dijera qué hacer para terminar con nuestra alopecia y tener un pelazo no escatimaríamos para tener la solución. Pero creo que lo pensaríamos dos, tres y hasta cinco veces.
Plasma Rico en Plaquetas (PRP): Es una micro-infiltración en zonas específicas del cuero cabelludo con el plasma obtenido de la propia sangre, que se extrae del paciente para separar proteínas específicas, las de crecimiento. Con ello se intenta estimular la generación de colágeno e incrementar la vascularización del folículo piloso. No hay estudios sobre su eficacia, pero es aconsejable para pérdidas de pelo moderadas.
Mesoterapia capilar: Este tratamiento sirve en aquellas personas que no han perdido la funcionalidad de los folículos pilosos. El procedimiento consiste en infiltraciones de sustancias revitalizantes (vitaminas, oligoelementos, minerales, etc.) en el cuero cabelludo. Se recomienda para mantener el pelo sano y engordarlo, pero no frena la caída.
Carboxiterapia: Se inyecta C02 al cuero cabelludo para incrementar la circulación sanguínea. No sirve para la alopecia androgénica, pero sí para la areata o difusa, o sea, perdidas por estrés o casos puntuales.
Terapia de láser: Es un tratamiento con luz láser que pasa sobre el cuero cabelludo para estimular la circulación sanguínea de éste. Su eficacia contra la alopecia androgénica no está demostrada. Actualmente, se venden sistemas personales para uso doméstico.
A lo largo de los años han salido al mercado productos farmacéuticos y cosméticos para detener la caída y generar el crecimiento del pelo. Aunque la publicidad sea efectiva y ataque nuestra ansiedad, lo cierto es que no tienen utilidad. Champús y lociones especializados desafortunadamente no frenan la caída. Los tratamientos orales tampoco han demostrado su eficacia y como no son nocivos para la salud uno los puede adquirir sin receta.
Sin embargo hay un par de productos que sí han demostrado su eficacia:
Minoxidil (2% ó 5%): Es una loción que se aplica directamente sobre el cuero cabelludo uno o dos veces al día. Este producto evita la caída del pelo y puede incentivar el crecimiento y la regeneración de pelo nuevo. El Centro Médico Sourasky de Tel Aviv, Israel, hizo estudios demostrando que sólo el 6,6% de las personas tratadas tenían mejoras cosméticas. Este tratamiento es de por vida, ya que dejar de aplicarlo provoca la caída del cabello ganado. Su actuación es más en la zona de la coronilla que en las entradas. El minoxidil presenta varios efectos secundarios, como: zumbido de oídos, visión nublada, mareos, aumento de peso, hinchazón de manos y pies, entre otros.
Finasteride: Es un fármaco oral, que se usa en dosis de 1 mg, y ha tenido resultados favorables contra la caída del cabello, en un 83% de los pacientes, y en el 66% permite engrosar los cabellos existentes. Es un producto recomendado sólo para hombres. Entre sus efectos secundarios están: trastornos de la eyaculación, disfunción eréctil, disminución de la libido, pero en un leve porcentaje de personas estudiadas; los efectos desaparecen cuando se suspende la medicación.
Toppik: Se puede decir que es un maquillaje capilar, ya que se mezcla con el pelo para dar volumen y densidad. Esto se debe a que es una solución de queratina con electricidad estática. Hay para todas las tonalidades de pelo y se quita con el lavado normal; o sea, nada de usarlo para ir a la piscina ni al mar.
Estás técnicas quirúrgicas han ganado pasos para satisfacer al paciente en cuanto al procedimiento y el resultado final. Lo que hacen es extraer raíces de la zona posterior de la cabeza y se colocan en las áreas afectadas por la alopecia. Puede ser una solución factible y mejor si se actúa en las primeras fases de caída. Hay dos procedimientos muy utilizados en la actualidad.
Transplante de tira (FUSS): Se extrae una tira de piel con pelos y luego se trasplanta folículo a folículo en la zona afectada. El procedimiento es más rápido y se trasplantan más folículos que con el siguiente procedimiento.
Técnica de extracción (FUE): Se extraen pelos uno en uno. No deja cicatrices y beneficia a quien quiera dejarse el pelo rapado. Este método es más caro.
En los dos tratamientos el pelo se cae al poco tiempo, pero se regenera ya que comienza su propia fase de crecimiento. El aspecto definitivo se puede ver al año o año y medio. Sin embargo, el trasplante dependerá de cada cliente, no se puede poner injertos sino se tiene mucho pelo. Es aconsejable hacerlo con expertos y en una clínica especializada.
Son células capaces de regenerar los folículos pilosos que han desaparecido o están muertos. Se sigue desarrollando esta investigación por lo que no está al mercado todavía, ya que el folículo piloso contiene dos tipos de células diferentes: las epiteliales y las papilas dérmicas, y hasta ahora sólo se ha podido conseguir la célula epitelial. Sigue en proceso de ensayo en varias universidades, y el procedimiento sería similar a la mesoterapia.
Prótesis capilares y Sistema capilar:
Estas técnicas no son la utilización de una simple peluca. Son cabelleras especializadas elaboradas por marcas y compañías con el fin de dar una apariencia natural. El sistema capilar es lo más novedoso, ya que es personalizado y utiliza materiales transpirables e hipoalergénicos; es decir, puedes usarla durante un largo periodo sin tener que quitártela. Puedes usar el sistema mientras duermes, te duchas, haces deporte, cualquier actividad diaria sin tener que preocuparte por nada. El cuidado dependerá del tipo de sistema y de la peluca que quieras, así como el precio. Es una opción apta para todos los tipos de alopecia y que no implica cirugías.
Es un tratamiento que simula el nacimiento del pelo y lo consigue por medio del juego óptico. Es un procedimiento que se tiene que llevar a cabo por expertos y con equipo especializado. Es ideal para aquellas personas que tienen caída irreversible y que no sea candidato a los microtrasplantes. La micropigmentación no es un tratamiento capilar, ya que no detiene la caída ni genera crecimiento; sin embargo, es una solución estética.
Como vemos, a grandes rasgos, hay varias opciones a elegir muy diferentes unas de otras y que dan resultados distintos. Hay varias donde debemos tomar una decisión con detenimiento, ya que pueden tener efectos irreversibles. Lo ideal es ir con expertos y hablar sin vergüenza sobre nuestro problema y si estás pensando en una cirugía lo mejor es informarte sobre los profesionales que están indicados para realizar estos procedimientos, por ejemplo en la Academia Española de Dermatología.
Por otro lado, hay tratamientos menos invasivos que pueden mejorar la calidad de nuestro pelo y ser utilizados combinándolos con otros. Tenemos que recordar y tener en cuenta que todas estas soluciones nos servirán para mejorar nuestra imagen, no para cambiarla.